martes, 14 de octubre de 2008
Se detuvo el día...
Recojería los pedazos de entusiasmo que me quedan y querría hacerme de las energías necesarias para avanzar, para salir de este camino que no lleva a nada.
No es carencia de felicidad, cada mañana cuando me despierto me siento feliz, de mi posibilidad de elegir, de vivir en paz, de ser libre, de caminar, de mi familia y de mis sueños, no es una cuestión de felicidad, es que simplemente el tiempo lo siento detenido.
Quisiera caminar por un camino distinto, pero a veces el miedo te deja quieto, pásmado, absorto, inmovil, te imposibilita y es cuando el mundo gana. Avanzar no es simple cuando pesa sobre tí el poder del pasado... Cuando cierras los ojos y repites una mil veces la película que ya no quieres ver... Es el minuto de escapar, salir corriendo y no volver.
Se detuvo el día, yo me acuerdo que tú estabas tan bonita y yo era tan niño, quedé pensado y cuando desperté todo lo que tenía, lo había regalado... Todo quedó suspendido y yo me perdí.
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